Un año después de su aparición en la web, El Aspirante salió en papel previo a las elecciones nacionales y ya circula por los pasillos de la ECI.
Por Magdalena Bagliardelli, egresada ECI
Pablo Natta, Lucas Guzmán, Milton Copparoni y Clara Acuña contaron a Qué, portal qué es y cómo surgió esta publicación. Se trata de un proyecto editorial promovido por una comisión de la Cátedra B de Taller de Lenguaje I y Producción Gráfica de la ECI, a cargo de Natta.
Milton, ayudante alumno del Taller I, pasó por la materia hace unos años y cree que hay una necesidad en el estudiantado de contar con un medio gráfico. “Sin la lógica de la corrección puesta encima, con libertad para elegir los temas”, dijo.
Estas dos ideas son fundamentales para el funcionamiento de El Aspirante. La selección de temas es libre y cada estudiante puede escribir sobre sus intereses, sin sostener una bandera política y siendo responsable con el uso de las fuentes.
Derribar fantasmas
“¿Cuántas preguntas hago?” “¿Cuánto desgrabo?”, son algunos de los interrogantes que surgen al principio de la práctica periodística.
Lucas Guzmán cursó el Taller en 2014 y este año se sumó como ayudante alumno. Comenta que “el primer temor al que se enfrentan los alumnos es el de la página en blanco” y que poder vencerlo “es una gimnasia en el oficio de periodista”. Por eso valora que exista un espacio como este periódico para escribir.
La actualización de contenidos en soporte digital es diaria. Al principio comenzó de manera voluntaria y luego se incorporó como una de las exigencias de la cátedra. “Llegamos después de 2 ó 3 prácticos en los que vimos copete, ética periodística y recibimos más de 400 notas”, recuerda Milton.
Todos los días a la medianoche se actualiza el portal. Cada uno puede subir su producción sin edición previa. “Esto permite mostrarle al alumno que es responsable de sus acciones y de sus notas”, explica el equipo editor. Luego, el miércoles durante el Taller eligen algunos de los textos publicados y se realizan devoluciones con las correcciones.
De esta primera experiencia digital surgió la posibilidad de llevar el periódico al papel. Todos los años el Taller finaliza con un producto gráfico y un grupo de estudiantes eligió encarar la publicación de El Aspirante.
Clara Acuña está cursando 1º año y es una de las propulsoras del proyecto en papel. “Todo lo laburamos nosotros”, aclara. Y añade que “salir a buscar publicidad fue terrible”. Con el apoyo de la cooperativa Comercio y Justicia Editores se publicaron 1.500 ejemplares.
Un aporte a la cátedra
Docente del Taller, Natta considera que el periódico tiene una vinculación dialéctica entre teoría y práctica. “Los contenidos teóricos se ponen en circulación al hacer el periódico”, asegura. Y agrega: “tenemos en claro la línea política: es un periódico escuela. El que escribe es alumno. Hay tolerancia al error”.
Natta resalta la importancia de confiar en el joven, en su autoregulación y autogestión. “Uno tiene que acompañar y contribuir a la pedagogía del amor, que es confiar en el otro”.
También reconoce que para la cátedra significa aprender que “el periódico se puede hacer acá, que se puede trabajar honestamente y que se rescatan intereses pedagógicos distintos”.
Practicar, crecer, vincularse, reflexionar son algunas de las acciones que promueve El Aspirante. “Está bueno pensar que en algún momento podríamos cobrar por ello. Que haya incentivos. No podemos ser verdugos de nosotros mismos”.