Rosendo Ruiz, ícono del cine cordobés, cuenta sus experiencias en el rubro, haciendo un recorrido desde sus comienzos.

Por Melina Fosfré. Estudiante de la ECI

-Dicen que uno nace con una vocación. En tu caso, ¿Cuándo  descubriste la pasión por el cine?

Fue desde muy chico, a los 9 años. A esa edad construí mi primer proyector allá en San Juan. Junté a varios chicos de mi grupo de amigos y realicé una proyección de imágenes, y un corto animado. Dos años después ya lo hacía con historietas y dibujos.  A mis 14 años, mis padres decidieron mudarse a Córdoba, donde primero hice teatro y con un grupo de compañeros fundamos “El Carro Producciones”. Finalmente me gradué como Licenciado de Cine y TV en la Universidad Nacional de Córdoba.

-En el 2011, se produjo un hecho coyuntural e importante para el cine de Córdoba con el film “De Caravana”. ¿Cómo surgió la idea de hacer esa película?

-En realidad la película está basada en una historia real. Surgió porque tenía un amigo que se había enamorado de una chica que iba al baile de La Mona. Él estaba en un mundo totalmente diferente, así que imaginate lo que fue para él todo eso. Me pareció una historia muy linda por muchas cosas. Entonces decidí junto con otro amigo y conocer el baile. Fuimos un día al Sargento, y fue espectacular, me encantó y estuvimos ahí adelante en primera fila. Por supuesto seguí yendo, ya nos reconocían y entre las idas al baile, la conocí a Johana, la chica que hace de “La Sara”. Imaginate, quien más podría interpretar mejor que ella ese papel, una piba que conoce el ambiente en carne propia.

– Luego de este éxito, vino el film “TRES D”, un género totalmente diferente al anterior. ¿Qué es lo que pretende mostrar la película?

-Creo que esta bueno que se muestre el mundo de los festivales de cine, un mundo que existe, un mundo concreto, un mundo donde circulan críticas y películas que son films que generalmente no se van a estrenar, no se van a ver y se perderían en el limbo. Yo creo que los festivales de cine, son los lugares de resistencia del cine, del cine que no es el americano Hollywoodense, entonces donde viven estas películas es en festivales.

-Mencionaste el cine de Hollywood, que es un gran suceso a nivel mundial. ¿Qué le falta al Cine Nacional Argentino para que sea más reconocido?

Hacen falta políticas e inversión. Ya existe un proyecto de ley de la cual soy uno de los impulsores. Me parece importante que haya un marco que regule esta actividad ya que necesitamos apoyo y recursos para que no se sigan perdiendo producciones, porque hay muchas, y muy buenas. Hay ideas muy buenas, mucha creatividad y gente para trabajar en esto. Tener una ley implicaría fomentar el arte, la cultura y además crearía muchos puestos de trabajo. Sería la oportunidad para muchos, de hacer cine.

-¿Estas con algún proyecto, o tenés alguno a futuro?

-Sí, estoy terminando de realizar un largometraje en el colegio Dante Alighieri. Estamos trabajando con alumnos, docentes y no docentes. Es un proyecto muy bueno, muy lindo. Se llama “Todo el tiempo del Mundo”, y fue producida por el mismo colegio y “El Carro producciones”. Es una historia muy linda y es un gran desafío, tanto la realización como lo que vendrá después. Porque nuestra idea es primero mostrarla en los colegios secundarios y luego estrenarla comercialmente… todo un desafío.