Continúan las denuncias contra la Planta de Bioetanol de la Empresa Porta Hnos, por la contaminación química ambiental en Barrio Parque San Antonio.
Por Gabriela Calas. Estudiante ECI
La Planta de Bioetanol de la Empresa Porta Hnos., ubicada en la zona sur de la ciudad de Córdoba, es denunciada por los vecinos desde febrero del 2012 a causa de los vapores tóxicos que elimina al exterior con graves consecuencias sanitarias.
Por eso el Colectivo de Vecinos Autoconvocados denominado asamblea VUDAS (Vecinos Unidos en Defensa de un Ambiente Seguro) reclama que la Planta de Bioetanol sea erradicada y traslada a zonas no urbanizadas. Silvia Cruz, vecina del barrio Parque San Antonio y miembro del colectivo, dijo que:”Es monstruoso lo que Porta hace a nivel contaminación, es un crimen ambiental (…) No podemos tener una planta química al lado de nuestras casas porque es un matarte a cuentagotas. Porque así como las armas de metal matan, las armas químicas también matan”.
Actualmente, a nivel nacional, se está empezando a debatir jurídicamente sobre la posibilidad de caracterizar a las violaciones ambientales como delitos de lesa humanidad; porque se considera que lo que se está produciendo en materia de derechos ambientales es, según el ex miembro de la corte Eugenio Zaffaroni, un “genocidio en goteo”.
Fue en el 2012 cuando la Destilería Porta Hnos. decidió cambiar su sistema de producción de alcohol, que anteriormente venía realizando a partir de la caña de azúcar, y comenzar con la producción de Bioetanol a partir de maíz transgénico (fermentado).
El etanol o alcohol etílico es un compuesto químico obtenido a partir de la fermentación de los azucares y una sustancia altamente inflamable y explosiva. Es uno de los gases considerados tóxicos por la Organización Mundial de la Salud.
La empresa no tiene estudios de impacto ambiental; y tampoco está registrada como productora de biocombustibles.
Incluso su primera habilitación fue hecha por el ex intendente Daniel Giacomino en el 2009 cuando la empresa ya venía funcionando desde 1995. Y como si fuera poco, el pasado 5 de marzo se le renovaron las habilitaciones.
Evaluando el impacto
Los vecinos después de advertir que “compartían diferentes afecciones a la salud” se comunicaron con la Red Universitaria de Ambiente y Salud/Médicos de Pueblos Fumigados para que realicen un relevamiento sobre salud y medio ambiente e investiguen lo que estaba “afectando a la población”.
La médica Luciana Ruderman, perteneciente a la REDUAS contó que en junio de 2013 se realizó una evaluación sanitaria y ambiental; y que, en lo referente a la “salud orgánica”, encontraron “muchos problemas a nivel ocular: irritaciones, conjuntivitis, diversos procesos inflamatorios que llevan a lagrimeos o mucosidad en los ojos; alergias varias en la piel, complicaciones respiratorias, cefaleas; gastritis”. Y en lo emocional, muchos “cuadros depresivos”.
“Empieza a afectarles la vida, con respecto a los olores desagradables, porque la gente se encierra en sus casas literalmente porque lo que se respira es horrible (…) y ahí empiezan los problemas de la tristeza” expuso la doctora.
Por último, la médica especificó que cuando preguntó a los vecinos a qué adjudicaban los problemas de salud de la familia, “un altísimo porcentaje de personas respondió: ‘Antes de que empezaran ampliar la planta estábamos bien y ahora tenemos problemas’”.
La letra de la Ley
Para profundizar sobre los resultados químicos, el ingeniero Marcos Tomasoni explicó que en las pericias químico ambientales, que se efectuaron entre junio y octubre del año pasado, se detectaron 3 sustancias categorizadas por la Ley nacional 24.051 como residuos peligrosos: “Tolueno, Xileno y Formaldehido”, e indicó que se encontraron por “sobre los niveles limites” que permite la Ley.
La Ley 24.051 de residuos peligrosos es penal y regula aquellos compuestos considerados peligrosos, según sus características químicas. Y señala que hay delito de contaminación ambiental cuando se usan productos químicos que contaminan la tierra, el aire y el agua; y perjudican la salud de los seres humanos.
Tomasoni además, agregó que encontraron Etanol “en 11 de las 12 muestras totales; y en proporciones muy elevadas”. Aunque según los peritos oficiales solo se encontró “Etanol en 3 muestras”.
Violaciones, denuncias y omisiones
El Dr. Darío Avila, especialista en temas ambientales y representante de los vecinos del barrio Parque San Antonio en la causa contra la Empresa Porta Hnos, relató que presentaron en la Municipalidad de Córdoba un petitorio solicitando la nulidad de las habilitaciones a la Destilería Porta Hnos.
Para Ávila esas autorizaciones son “inválidas” porque fueron hechas en “violación a la Ley Gral. de ambiente 25.675“. “La Municipalidad no pidió a la Empresa estudios de impacto ambiental y tampoco convocó a audiencias públicas para que los vecinos puedan manifestarse (…) procedimientos previos que se exigen para autorizar una Empresa que puede tener impactos ambientales y sanitarios” declaró el Dr. Avila.
Agregó que la Municipalidad no contestó ese planteo y que ahora se está recurriendo a la Justicia a través de una “Acción de Legitimidad” para que sea ésta la que “declare nulo esos permisos”, porque la Municipalidad “perdió la potestad de hacerlo al no contestar”.
En paralelo, la Empresa Porta, incluso está vulnerando ordenanzas ambientales municipales: La 5203 (Enrarecimiento del Aire), la 7104 (Contaminación de Flora y Fauna) y la 8117 (Ruidos y Vibraciones).
Ademas, el jurista, se refirió a la denuncia penal que presentaron contra la Empresa Porta Hnos, considerando la ley nacional 24.051 de residuos peligrosos.
“Denunciamos a la Empresa Porta Hnos. porque entendíamos que ésta podía estar conformando un delito de contaminación del medio ambiente, precisamente por su sistema de producción (…) Nosotros entendíamos que era eso lo que estaba afectando a la salud de los vecinos y entonces planteamos esta denuncia penal”, declaró.
La respuesta del fiscal a cargo, José Mana, fue “que no había delito y que la presencia de gases estaba por debajo de lo permitido”. Los vecinos cuestionaron la pericia; y recientemente el juez de control dio lugar a la apelación y están esperando la decisión del Fiscal de Cámara.
Mientras tanto, los vecinos continúan esperando una respuesta satisfactoria frente a una agresión en contra del medio ambiente y de los seres humanos. Una agresión, no por medio de balas; sino a través de venenos químicos. Venenos que, nada más y nada menos, son tóxicos.
Testimonios de vecinos y entrevistas al Dr. Medardo Ávila Vázquez. Canal 10.